Un subdominio es una división o una extensión del dominio principal que permite organizar y separar las secciones de un sitio web de manera eficiente. Los subdominios funcionan como direcciones independientes bajo el mismo dominio principal, y son utilizados comúnmente para separar áreas de un sitio web, como tiendas en línea, blogs o paneles de usuario.
Por ejemplo, si el dominio principal es “ejemplo.com”, un subdominio podría ser “blog.ejemplo.com”. Aquí, “blog” es el subdominio que apunta a una sección específica del sitio web, que en este caso sería un blog. Los subdominios son gestionados a través del DNS (Sistema de Nombres de Dominio) y pueden ser dirigidos a diferentes servidores o directorios, lo que les permite funcionar casi como dominios completamente independientes.
La utilización de subdominios es una práctica común porque permite estructurar mejor los sitios grandes y puede ayudar a optimizar el SEO (Search Engine Optimization) al proporcionar claridad sobre el contenido específico del subdominio, además de que generalmente no incurren en costos adicionales más allá del dominio principal.